MONTALVO, MARÍA JESÚS
En El ciclo de mis días se encontrarán frente a un calor primigenio y transcendental que irradia desde el espejo que proporciona un compromiso, una amistad, una promesa, una venganza
Incluso la decisión de ponernos fin. Un movimiento, en definitiva, de espacio-tiempo que serpentea, entre páginas y lectura, hacia el devenir de la eternidad cotidiana.
A veces surrealista, otras optimista o trágica y, en muchas ocasiones, con cierto sabor triste que nos arma y nos suspende en el horizonte. Relatada, principalmente, a través de la figura del narrador externo que observa y cuenta tratando, cuando la historia lo permite, de hacernos esbozar alguna sonrisa con el deseo de
convertirla en carcajada.